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Cuidados básicos: comprender cómo funciona el cuero

Parte del atractivo de una chaqueta de cuero es su versatilidad. Se ve muy bien tanto en hombres como en mujeres, y funciona con varias capas y texturas. 

Si bien el cuero complementa la mayoría de los atuendos, se debe tener especial cuidado para garantizar que la tela dure, ya que el cuero no se puede limpiar con los métodos tradicionales de lavandería. 

Consejo rápido: Recuerda que tener alguna de las corbatas de temporada te permitirá mantenerte a la moda.

Cuelgue su ropa de cuero en perchas de madera en un área fresca y seca para ayudar a la chaqueta a mantener su forma, ya que el plegado puede crear pliegues. Esto también preserva la integridad de la tela y evita cualquier estiramiento que pueda ocurrir.

Cuidados extras: impermeabilización y eliminación de manchas

Tratar con los elementos

Antes de usar su chaqueta de cuero nueva o vintage para el brunch de fin de semana o una noche en la ciudad, no olvide impermeabilizar. Limpie ligeramente la chaqueta con un paño húmedo y termine con un chorrito rápido de protector de cuero para asegurarse de que su pieza de inversión esté lista para todas las condiciones climáticas. Este simple paso también protege contra posibles manchas o derrames, y también funciona para zapatos y botas de cuero. Haga una prueba puntual antes de la aplicación rociando una pequeña sección para verificar cómo reacciona el cuero al producto. Si no ves ninguna decoloración o cambios en la textura, procede a cubrir toda la pieza. Para obtener los mejores resultados, repita este proceso al comienzo de cada nueva temporada.

Cuidado de manchas menores

Si has tenido un pequeño resbalón con tus pantalones o chaqueta de cuero, mantén la calma y séjate. Para una mancha a base de agua, resista la tentación de alcanzar un secador de pelo; en su lugar, deje que se seque al aire de forma natural. Las manchas de tinta y sal de carretera pueden ser ocurrencias comunes; frotar alcohol se encargará de lo primero, y el jabón de silla de montar ayudará con cualquier sal en su calzado de cuero. Como siempre, pruebe un área pequeña antes de cubrir un área grande de la tela con cualquier sustancia dada. Si estos métodos no logran eliminar la mancha, considere enviar sus piezas a un servicio de limpieza profesional. Cuidado estacional: limpieza y almacenamiento de áreas pequeñas antes de cubrir un área grande de la tela con cualquier sustancia determinada. Si estos métodos no logran eliminar la mancha, considere enviar sus piezas a un servicio de limpieza profesional.

Cuidados estacionales: limpieza y almacenamiento

Limpieza profesional sobre el cuidado en el hogar

Siempre hay riesgos inherentes a la limpieza del cuero, así que opte por el cuidado profesional en lugar de la ruta de bricolaje; es posible que pueda ocuparse de algunas manchas menores, pero tratar una mancha obstinada a base de aceite usted mismo puede provocar algún daño en el material. Si bien puede parecer un costo adicional, la limpieza profesional le ahorrará dinero a largo plazo al preservar su ropa durante un período de tiempo más largo. Sin embargo, contrariamente a la idea errónea común, el cuero no se puede limpiar en seco. El tratamiento térmico hará que la tela pierda sus aceites naturales, lo que puede provocar sangrado de color o agrietamiento en el material. Dicho esto, lo más probable es que su tintorería pueda subcontratar su prenda al mejor limpiador especializado de la ciudad para garantizar que su atuendo reciba la atención experta que merece.

Almacenamiento para la temporada baja

Invierta en un acondicionador de cuero para mantener sus piezas suaves y flexibles entre desgastes. Mantenga su chaqueta en una percha acolchada o de madera: una percha de alambre se doblará y, como resultado, puede estirar el material. Si planea mantener su chaqueta en una bolsa, una bolsa de tela es preferible a una de plástico porque la primera permitirá que el cuero respire. Para cualquier prenda de cuero que posea, envíela primero a un limpiador para que se ocupe de las manchas y los olores antes de almacenarla en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar.

El cuero requiere atención adicional para que se vea lo mejor posible, pero eso no significa que tenga que ser un proceso doloroso. Al seguir nuestros consejos de cuidado de expertos, mantendrá sus piezas de cuero favoritas en excelentes condiciones, sin demasiado alboroto.