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Te decimos cómo prevenir el dolor de articulaciones

Las articulaciones forman las conexiones entre los huesos. Proporcionan apoyo y ayudan a tener un movimiento adecuado. Cualquier daño en las articulaciones debido a una enfermedad o a una lesión puede interferir con tu movimiento, tus actividades diarias y causar mucho dolor.

 

Causas del dolor de articulaciones

El dolor articular es muy común, especialmente a medida que se envejece. En una encuesta nacional, cerca de un tercio de los adultos declaró haber tenido dolor articular en los últimos 30 días. El dolor de rodilla ha sido de las quejas más comunes, seguida del dolor de hombro y cadera. Pero el dolor articular puede afectar a cualquier parte del cuerpo, desde los tobillos y los pies hasta los hombros y las manos.

Existe una gran variedad de enfermedades que pueden provocar dolor en las articulaciones:

  • La osteoartritis, una enfermedad de “desgaste”, es el tipo más común de artritis.
  • La artritis reumatoide es un trastorno autoinmune que se produce cuando el cuerpo ataca sus propios tejidos.
  • La bursitis se produce cuando se inflaman los sacos de líquido que ayudan a amortiguar las articulaciones.
  • La gota es una forma de artritis que suele afectar a la articulación del dedo gordo del pie.
  • Distensiones, esguinces y otras lesiones.

A menudo, el dolor puede venir acompañado de hinchazón e inflamación, rigidez y pérdida de amplitud de movimiento.

 

 

dolor articular

 

 

Suplementos para la artritis y el dolor articular

Muchas personas toman vitaminas y suplementos para aliviar el dolor articular y la artritis. ¿Qué eficacia tienen estos suplementos? A continuación te damos algunos consejos para ayudarle a elegir los suplementos adecuados para tus articulaciones.

Algunas personas utilizan suplementos para tratar de controlar el dolor articular provocado por la artritis. La glucosamina, la condroitina, el omega-3 y el té verde son sólo algunos de ellos.

 

Glucosamina

La glucosamina se ha promocionado como un antiinflamatorio que ayuda a mantener sano el cartílago de las articulaciones. Los estudios han demostrado algunos beneficios para el dolor articular, pero no son concluyentes. Los niveles naturales de glucosamina disminuyen a medida que las personas envejecen.

 

Condroitina

La condroitina se utiliza a menudo con la glucosamina como tratamiento de la artrosis. Sin embargo, no se ha demostrado que la condroitina ayude al dolor articular.

Las investigaciones sobre la eficacia de la glucosamina y la condroitina para los síntomas de la artritis son contradictorias. Los médicos no recomiendan estos suplementos, pero no se oponen a su uso si el paciente obtiene alivio al utilizarlos.

 

 

Condroitina para las articulaciones

 

 

Ácidos grasos Omega-3

Los ácidos grasos omega-3, que se encuentran en el aceite de pescado y en otros alimentos, estimulan al organismo a producir sustancias químicas que ayudan a controlar la inflamación. Este suplemento puede ayudar a aliviar la rigidez causada por la inflamación en personas con artritis reumatoide, pero se necesita más investigación.

 

Curcumina y/o Boswellia serrata

La curcumina (ingrediente activo de la cúrcuma) y/o la Boswellia serrata proporcionan alivio a las personas con artrosis de rodilla. Tienen propiedades antiinflamatorias.

 

Té verde

El té verde contiene compuestos con potentes propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que pueden ser útiles para combatir el dolor articular.

 

Vitamina D

La vitamina D es importante para mantener los huesos fuertes y prevenir lesiones por caídas. Las investigaciones demuestran que las personas con niveles bajos de vitamina D pueden tener más dolor articular.

 

 

Consumo de vitamina D

 

 

En la actualidad existen muchas vitaminas, suplementos y extractos de hierbas en las tiendas especialidades y farmacias para tratar el dolor de las articulaciones. Utiliza estos consejos para saber cuáles pueden ser adecuados para ti.

Cuando se trata de vitaminas y minerales es importante que consultes a un profesional de la salud para que averigües los límites máximos de seguridad de las vitaminas que debes tomar, así como la cantidad diaria recomendada que puede necesitar. De igual manera, también puedes seguir las recomendaciones del fabricante.

 


 

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